¡Qué bien me siento! He motivado, cooperado, empujado, promovido (o lo que sea)
la maravillosa idea de reunir con su familia a Dominique, la haitiana nacionalizada
estadounidense que estaba varada en nuestro país desde hacia meses. Pues por su
sobrepeso no la dejaban subir a las aeronaves de líneas aéreas.
Sin
buscar ningún tipo de cámara, payola o figuero (como muchos pensaron), hice el
grupo en facebook: Un Vuelo Para Dominique. Ya que me inspiró las cosas que se
lograron con Henry Alcántara. Al ver un reportaje en el canal 11, donde salía un
piloto conocido diciendo que se podría gestionar un vuelo privado para
ella, pero que rondaría por los 11 mil dólares... algo me sacudió la cabeza y
empecé a sacar cálculos. ¡Era demasiado dinero!
Si
ella no cabe por una compuerta de aviones comerciales, hay que pensar en otra
opción. Si ella no puede ajustarse el cinturón de seguridad, hay que buscar
otra opción. Si ella no puede subir escaleras, también hay que pensar en otra
solución. Recordé que los aviones Casa 212 de la FAD tienen una compuerta
trasera, tiene una rampa, por lo que no se necesita subir escalones, y que
pueden llevar personas o carga según se necesite. Busqué sus características
por Internet. Luego llamé a un amigo despachador de vuelos, preguntándole los
requerimientos mínimos de una aeronave para movilizar y transportar una persona
de la envergadura y peso de Dominique.
Ya
estaba seguro que el avión correcto era el Casa 212 de la Fuerza Aérea. Envié
varios correos a mis conocidos aeronáuticos, incluso a los jefes de los jefes
explicando la situación de Dominique y mi propuesta para regresarla a Miami.
Solo proponiendo que el medio de transporte fuera ese avión y que se buscara
cubrir el combustible del mismo. Para mi suerte, ese mismo día me respondió un
alto funcionario aeronáutico y me dijo que estaban sopesando varias
posibilidades, y que mi propuesta parecía la más atinada. ¡Yo feliz!
Lo
único malo de esto para mí, fue que la persona que enviaron a evaluar
clínicamente a Dominique, me contactó por teléfono pidiéndome datos de ella y luego "me sacó los pies". Le
di toda la información que tenía, y a la vez le pedí mas de una vez que me dejara
acompañar al equipo médico a La Caleta para conocer a Dominique mientras la
evaluaran. Me dijo: yo te aviso... Dominique ya esta en Miami y aún estoy
esperando que me avise...
Sinceramente,
yo quería conocerla. No por brillar, no por cámara, no por figureo, pero parece
que eso pensaban de mi algunas personas. Cada vez que llamaba para saber como
avanzaban las cosas, la misma persona me respondía: "te aviso",
"te mantendré al tanto".... Tanto lo hizo que supe por Twitter que
Dominique seria trasladada el jueves 10.
Me
negaron toda información del proceso, pero mientras querían ser exclusivos en
todo, lo que me importaba y aún me importa es que todo se daba positivamente
para Dominique. Y mientras la persona aquella no me decía nada, mis compañeros
controladores me llamaban y me ponían al tanto de todo con relación al vuelo de
la aeronave de la FAD. Me dieron la identificación de la aeronave, a que hora
salio de San Isidro, a que hora aterrizo en Puerto Plata, a que hora despegó de
Puerto Plata, su estimado a Miami, y lo mejor, la hora a la que aterrizó en
Miami.
Yo
estaba que me reía solo, casi brincaba de lo contento. Eso era suficiente para
mi, estaba (y estoy) feliz por Dominique, estoy conforme con lo poco que hice,
algo que para muchos es joder, molestar, fastidiar. No se hasta que punto tuvo
efecto el grupo de facebook, mis correos y mis llamadas, pero de lo que sí
estoy seguro es que de alguien necesitarlo, haría lo mismo o más. Un día podría ser yo quien necesite ayuda.
Otra
vez digo y escribo: ¡Si uno puede ser diferente, muchos haríamos la diferencia!