Siento que mi vida no vale nada,
al final soy lo que tanto criticaba.
Un hombre solo, vacío y solitario,
arrepentido de todo casi a diario.
Esta soledad me estrangula
y mi corazón a ciegas deambula.
Soy infeliz sin ser culpable,
morir solo ya es muy probable.
Mil preguntas me acorralan
y mis lágrimas mudas resbalan.
Cada minuto me siento traicionado,
viendo al enemigo cruzar a mi lado.
Día tras día voy cayendo al abismo
mientras hablo conmigo mismo.
Si no fuera por la música estaría loco,
y para cruzar esa línea me falta poco.
Me abruma tanto esta decepción,
no creo haber merecido esa traición.
La impotencia de no poder vengarme
calla mi rencor y me hace aislarme.
Hace años mi vida se destruyó,
sin preguntarme, alguien lo decidió.
Tiempo después me lo ha confesado
y vive como que nada ha pasado.
De esa persona jamás lo esperé,
nunca en mi vida la perdonaré.
Alejó de mí lo que más amaba,
desde entonces mi vida no vale nada.
