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07/01/2010

A falta de papá... recuerdos


Rebuscando entre papeles me topé con el recordatorio de la muerte de mi papá. Muerte que no me afectó, sino hasta meses después.

Mi cumpleaños 36 fue uno de los más aburridos que he tenido... De un tiempo para acá, mi fiesta es tener a mi esposa, mi hija Laura y mi hija Ely en casa. Para sacar a mi hija Flor de Samaná hay que dar muchas vueltas, ella siempre quiere estar en su campito. La entiendo, la capital nunca le ha gustado ni para visitar. Con mis mujeres me conformo y creo pasarla bien aunque sea viendo TV con ellas en la cama.

Tenerlas cerca me hace sentir importante para alguien, aunque sea por un solo día. Pero fue poco lo que disfruté. El padrastro de Laura me la llevó a casa, pero esta se la pasó en el cuarto chateando, apenas me hizo compañía.

Por motivos de salud, mi hija Ely no pudo ir a casa a visitarme, pero lo que ya mi día importante no lo era tanto. La mesa estaba coja de una pata... Así que entre llamadas perdidas y contestadas, correos, mensajes al celular y demás cosas me pasé ese cumpleaños.

¡Lo que nunca pensé en mi vida, es que me hizo falta mi papá! Ni yo me lo creí, pues es un señor que apenas menciono en mi vida. Por primera vez en mucho tiempo, me puse a "fantasear" de como sería mi vida si mi papá me hubiese criado, si hubiese sido mi ejemplo moral y lo más importante, si me hubiese demostrado cariño. Lamentablemente, no tengo recuerdos para fantasear eso.

Prácticamente me crié sin padre, mis "figuras paternas" fueron mis primos y los esposos de mis tías. Mi papá apenas pasaba por la casa una o dos veces al año. Las escasas veces (repito; muy escasas veces) era llevando algo de dinero para mis gastos. Ir de visita un fin de semana a la casa de mi papá era como un viaje espacial, todo era otro mundo. Algo que hacía dos o tres veces durante algunos años. Recuerdo poco, pero estoy claro de que económicamente no vivía mal.

Recuerdo los tiempos en que ser rockero equivalía a ser satánico. Yo no llegaba a 18 años cuando tuve la "primera conversación de padre a hijo", motivada por mi vestimenta negra, mis intentos de pelo largo y mi "música del diablo". Un día el hombre (obviamente con vaso de romo en mano) llega de visita a la casa, habla unos minutos con mi madre en la sala. Luego me dice; ven, vamos a hablar. Sale a la galería, se fuma casi todo su cigarro de un chupón y mirándome. Me dice: Mi hijo, ¿tú metes droga? Lo miro sorprendido y respondo que no. Luego se pega un trago largo de su romo puro (lleno de ceniza) y me dice: mi hijo, ¿ tú eres maricón? Lo miro más sorprendido y le respondo que no. Me mira, pone su mano en mi hombro y me dice algo (más o menos) como; "bien, sigue así". Sin decir más, dio la espalda, se montó en su auto y se fue. Esa fue mi gran "primera conversación de padre a hijo". (Espero que mi memoria me ayude a llevarme a la tumba todo lo aprendido).

Si mi papá estuviera vivo, estaría dando carpeta, diciéndole a cada joven con falda que ve: Oye linda, vamos a pintarte un muchachito. Así de sencillo era ese señor. Independientemente de como sería mi vida con mi papá vivo, creo que estoy mejor como estoy. Las cosas pasan por un motivo, y si murió antes de los 55 años fue porque no se dejó ayudar ni cuidar. Así que solo recordaré sus poco creíbles historias de cuando vivía en el campo, cuando era militar activo, cuando Balaguer, etc... todas contadas con su eterno olor a romo y cigarro. ¡Y claro, siempre con música de Bob Marley de fondo!

Espero muy sinceramente ser el padre que no tuve, y no cometer los errores que el cometió. La vida da muchas vueltas pero, lo que menos quiero hacer como él, es morir solo (y no me refiero a no tener pareja).

Ese diciembre fue la primera vez que me hizo falta. Por lo que me hago una pregunta: ¿lo extrañé porque nunca estuvo presente o porque murió? Lo veía tan pocas veces en mi vida, que hasta se me hace difícil encontrar la respuesta.

25/11/2009

¡Hoy nací de nuevo!


Hoy día 25 de noviembre, creo que he vuelto a nacer.

Anoche pasé por casa de mi hija Laura,  para  verla y  hablar algo con su madre. La que necesitaba que depositara unos papeles en el colegio donde está mi hija, lo cual accedí. Por lo que el día de hoy salí unos minutos más tarde de lo habitual rumbo al Seminario en que estoy participando en el Hotel Hamaca, pues me detuve en el colegio unos 5 minutos o un poco más haciendo la diligencia de mi hija, luego salí hacia la autopista Las Américas, rumbo al seminario.

“Agarré” mi autopista como siempre he tomado, rápido, pero sin imprudencias. A la “altura” (debería ser distancia, pero los de aquí hablamos así) del kilómetro 22, o 23 de la autopista, casi frente de la zona franca de Las Américas me pasa este detallito:



Voy rápido en el carril central detrás de una camioneta, a la izquierda va una jeepeta y un auto, van casi parejos por lo que no podía rebasarles. De repente que la camioneta frena por un  motorista sin casco cruzando la autopista desde el carril izquierdo al carril central y al derecho, suelto el acelerador y le toco bocina... por suerte se "quita del medio" y continúa desde el centro al carril derecho (pero no hasta el “paseo”). 

Cuando vuelvo a acelerar no pasa ni un segundo y de la nada... me sale otro motor, pero con tres (3) personas sin casco haciendo lo mismo... por lo que me echo a la izquierda al carril central, pero ahí estaba la camioneta, que frenaba para no darles... debí seguir entre el central y el derecho pues yo mantenía casi la misma velocidad que la camioneta, ella frena casi de golpe y evita el motor que lleva los tres, pero este motor seguía hacia el carril donde estaba yo. Estos venían prácticamente sin mirar.

Aún sin frenar, evito al motor del carril derecho, pero los hijos de su mald__ madre en el otro motor seguían diagonalmente hacia mí... Si giraba a la derecha le daba al primer motor, si seguía derecho le daba al motor de los tres, si giraba a la izquierda  le daba a la camioneta y si frenaba me chocaban por detrás... Busqué la forma de pasar entre ambos motores.

Hice una especie de "Z", como un zig-zag corto, así ganaba espacio con el primer motor y evitaría al otro motor más lento. Pero por más bocina que toqué, siguieron como si nada y:


El motor más lento  me chocó y prácticamente se quedó pegado de la puerta trasera izquierda, eso hizo que el motor y los tres idiotas me dieran un "culatazo" haciéndome perder el control de mi carrito, cuando me vi apuntando a la izquierda vi que le daría a la camioneta, cuando meto el guía a la derecha, veo que le voy a dar al otro motor y de repente me veo entre una "mata de coco" y un poste de luz. Al final fue con el poste.


Aguanto la respiración, aprieto mi guía  recuesto mi espalda del asiento, tenso todos mis músculos y ¡Pum! Me lo llevo... En menos de 5 segundos veo como vuelan esos mald____ motoristas, desprendí del suelo el poste. Luego del golpe, eché un solo "coñazo", abrí mi puerta y salí. Vi los motoristas tirados. Con todo y choque, yo ni me despeiné. (Y eso, que casi nunca me peino)

Salí del carro y me pongo a llamar al 911 y nada, llamo a la policía y nada, llamo a los bomberos y nada, llamo a Seguridad Vial (entrada de Carretera de Samaná) y nada... Al ver a los tirados en el suelo y que nadie respondía, empecé a tomar fotos al carro. Los mirones llegaban corriendo, ¡se mató el del carro! ¡Se mató el del carro! ¡Y chocó un motor!

De la nada apareció un teniente del EN que trabaja conmigo, se quedó hasta llegar los AMET.  Señores... ¡Qué decentes, qué profesionales, cuánta amabilidad de los AMET.. ¡Me sorprendieron! Empezaron a tomar datos de todos y a hacer preguntas y me sorprendió esto:  El motorista al que "no le di" salió en mi defensa, diciendo: "nos metimos mal, yo lo vi pero ellos no, el lo hizo bien, fue culpa de los del otro motor". Yo me quedé con la boca abierta. Pues lo que uno espera es que te hable de Darío Contreras y de dinero... pero este fue decente, claro y sincero (algo raro ver eso en un motorista).

De todas los compañeros de trabajo que llamé, se me apareció Fernando. Al ver el tumulto de gente le dije: mano estoy bien, llévate mi bulto con todo lo que pude sacarle al carro. Cuando el se va ahí llego la grúa no se de dónde, pero llegó. Aparece una camionetica y se llevan a los tres accidentados (uno de ellos estaba feo para la foto) no se para dónde y la grúa se lleva mi carrito. Casi ahí me doy cuenta que se me van las llaves de mi casa, y el capitán Valdéz de la AMET se ofreció "cortésmente" a llevarme en su vehículo (en calidad de detenido) al destacamento del Megapuerto. De ahí me llevó a otro destacamento donde me esperaba uno de mis jefes. Y "jefes con jefes se entienden".

Esperamos la llegada del capitán a cargo para tomar mi declaración, cuando acabamos me dice: "Ven mañana después del mediodía, según me informen como están los accidentados, debes ir al tribunal de tránsito, luego te devolvemos tu licencia y con este papel vas y puedes buscar tu carro al día siguiente".  Después de dar las gracias a todos, le pedí a mi superior que me llevar al hotel Hamaca a terminar el último día del seminario que estoy tomando, me llevó. Todo el mundo sorprendido al verme , pues seguí mi día normal, y a la tarde le pedí a Fernando que luego de salir del seminario me llevar a la clínica Integral II, para ver a un médico (por si acaso).

Fui a emergencias, me enviaron a un ortopeda traumatógolo... me revisó todo el pecho, espalda, hombros y brazos... solo me mandó a tomar una radiografía de la clavícula izquierda, por suerte todo lo revisado esta babien. Dijo que fue el "jalón" que me dio el cinturón y me dio un solo boche por esperar todo el día para revisarme luego del accidente... y mandó para mi casa. Ahora solo espero que llegue mi esposa para contarle mi día.

Le doy las gracias a los mirones que no me entraron a pedradas ni me atracaron, como acostumbran ante estos accidentes.

05/11/2009

He vuelto



He vueto, estaba dormido por la mezquindad de algunos que circunstancialmente están por encima de mí, a quienes no "les gusta" que les digan la verdad. Atado de pies y manos por unos con algo de poder, como políticos. Estaba enfermo por el veneno de los que mataron mi pasión por la fotografia, como portadores de la peste. Estaba enterrado bajo la suela de los zapatos de  que aquellos me tenían pisoteado, sin poder ver el cielo, mutilando mi deseo de aprender, desnutriéndome cada día más de mi labor, como sanguijuelas.

Con su abuso de autoridad hicieron que dudara de mi propia capacidad, obligaron mi brazo torcer, humillaron mi integridad, omitieron mi profesionalismo, detuvieron mi progreso, pero cometieron un solo error: me dejaron vivo, y yo soy rencoroso hasta la muerte.

Me sentí por largo tiempo, como un pez fuera del agua, como un cero a la izquierda, como un cheque sin firma, como una guitarra sin cuerdas. Subutilizado, minimizado, encerrado en la jaula de dueños del circo, puros oportunistas que manejan las piezas del ajedrez a su conveniencia en la aviación nacional. Varios amigos, amistades, compañeros laborales, relacionados y conocidos, me decían: Nada es eterno, nada dura para siempre, les llegará su tiempo. Pero yo respondo; ok, nada dura para siempre, pero mientras ellos están en la opulencia de sus "carreras", yo estoy en el hoyo de una espiral, en un barril sin fondo, en la lista de los "lesionados". Ellos comen a la carta con cucharita, mientras yo como pan con huevo. Yo no le deseo mal a nadie, pero a esos han marcado negativamente mi vida... no les deseo nada bueno, nada, pero nada bueno.

El estrés es una de las cosas más perjudiciales. La desinformación y el mal manejo que le di a las situaciones que no estaban en mis manos me llevo a ser víctima del síndrome Burn Out. En muchísimas ocasiones me electrocutaba el estrés, estrés laboral. Solo siento un corrientazo virtual en mi mente y explotaba con quien tuviera cerca. No veía a quién, solo sacaba lo peor de mí como si un demonio quisiera salir de mi infierno.

No soy mala persona, pero mi mal manejo de estrés me alejo de mi familia y de mis amigos. Solo soy un mal "expresador" (esta me la acabo de inventar) de mis sentimientos, soy un mal "escuchador" (otra nuevecita) de consejos, opiniones y criticas de quienes se preocupaban por mí... Nadie le da mente, pero el estrés lleva a los infartos y a los derrames cerebrales.

Ahora he vuelto, no por la revancha, sino por mí y para mí. Gracias a la única persona (después de mi madre) que desde que está a mi lado ha demostrado que cree en mí, que cree en mis pasiones, en mis locuras. La única persona que me ha soportado tal como soy, como ni yo mismo me soportaría: mi esposa Jenniffer.  Ella calma los demonios que aún están dentro de mí, y adivinen con qué... con su risita de payasita de circo, me calma y hasta me saca una sonrisa. Esa risa y su cautivadora mirada son el antídoto para el veneno que tengo dentro. Son el sedante que tranquilizan los latidos de mi corazón. Se que ella a cogido más piques viviendo conmigo, que durante toda su vida, pero ella me soporta. ¿Cómo lo hace? Ni puta idea.

Ella sabe que debajo de este sapo, hay un príncipe teñido de azul dispuesto a matar por ella. Ella sabe que dentro de este gusano, hay escondida una abeja de buena miel (mariposa suena muy gay). Ella sabe que no soy tan malo como me veo, ni como esos malditos hicieron parecer. Pues ellos seguramente erraron igual o peor que yo, pero no soy de su coro, de su "anillo". Entiendo que como era costumbre, el yo escribir algo como esto es calentarme. Pero, ¿qué me importa? ¿Van a hundirme más bajo de donde ya estoy?

Si mi esposa Jenniffer no me da todo su apoyo (y agallina), yo no estaría ahora escribiendo esto. Ahora trataré lentamente de compartir mis memorias de estos dos años "en coma digital". Ahora termino mencionando las deudas que creo nunca podré pagar:

A mi madre, por darme este tamaño ella sola.
A mi hija, por hacer mi vida completa y darme los mejores tormentos de la vida.
A mi amada esposa, por ver que no soy tan malo como parezco y levantarme de mis cenizas.

10/11/2008

Miami, Pan Am Flight Academy 2008

Y volvimos a Miami conociendo más rutas, más lugares y más tiendas... ¡Ah, las tiendas! Con sincero pesar lamento no tener la compañía de mi gran amigo Eddy (don Cangrejo), pues este fue asignado a otro grupo voluntariamente obligado. También me hicieron falta las multi-compras, pues hice ese viaje con el plan de comprarme otra buena laptop, un iPod mejor que el otro y un radio para el carro. Así que Walmart era la parada obligatoria..
Como dije, en este viaje fui recogido, con un hoyito en el bolsillo para no llevarme del gusto. Así que varios días me la pase en la habitación, comiendo sopa de microondas, inclusive sin comprarme mi 18pack de Miller y chateando con mi esposa Jenniffer. ¿Con quién más?
Para el 20 de octubre, día del controlador, celebramos con mucho romo y un BBQ en el área de la piscina de otro hotel. El Homestead, donde habían hospedados varios de nosotros, frente al Comfort Inn. Era el clásico ambiente de controladores, hablando de aviones, aviones y aviones. ¡Qué vaina la de estos tipos!
Estas clases iniciaron un poquito menos tensas que en 2007, pero igual de importantes. Lo que no  me gustó  es que nos tocó el laboratorio de  simulación en remodelación y debimos usar en línea 8 monitores de TV de 52 pulgadas para simular los 180 grados de visión periférica humana. No era lo mismo.
Como tenía planeado comprar laptop desde hace tiempo, estaba al día con eso de los precios y por cosas de la vida vi un brochure de Circuit City con unos precios atractivos. Me pasé "pasillando" toda la tienda por 1 hora, viendo, probando y comparando laptops con las ofertas de BestBuy y Walmart, al final me quedé en CC. Me llevé mi nueva nena para el hotel y días después la fiebre no me dejaba levantarme de la cama. (ojo: no estaba enfermo)
Mientras estuve en la habitación, me la pasaba con la laptop. Y cuando no, era con el ritual de grupo ¡Beber! Casi siempre era dentro del hotel pues como saben, si agarran a uno en la calle en eso, lo último que veremos es la luz del sol. Por aburridos que estemos, unos traguitos nos ponían en onda, y no había que ir muy lejos para ver algo nuevo, en pleno parqueo nos topamos con este "trípode" de motor un Trike. Nunca lo había visto "feis tu feis". Lógicamente, sin importar el lugar a visitar, ahí andaba yo con una ropa negra y mi carabelita.
En la foto que sale más abajo, no estoy molesto, ni killao, ni "etreñio". En esos días hacía un frío del carajo, pero a la vez un sol molestoso. Aunque eso no molestaba "para coger calle". Pues hasta Brandsmart llegamos, donde compré un buen radio de carro que solo le falta tocar LP.
Este viaje fue distinto, divertido en parte. Por suerte ya teníamos conocidos para visitar. Sabíamos de lugares económicos y otros para pasar el rato. Obviamente no vivíamos en la calle, porque debíamos estudiar para las evaluaciones diarias. No le quedamos mal a nadie. Eso es bueno.
Aún con los chelitos contados, dábamos vueltas por algunas tiendas, pero no más por Sawgrass Mills, para que Chamú no se perdiera como en el 2007. Salíamos y comprábamos cositas que en mi pasito cuestan un ojo. (Obviamente de la cara)
Debo confesar que el orden, la limpieza, los servicios que veo en EE.UU. me causa un dolorcito al comparar con RD. Bien que seamos "la joya del Caribe" y otras cosas, pero somo sun desorden en tránsito, en educación, en precios, en servicios (y si sigo, no termino). Aunque EE.UU. me asombra, solo viviría aquí si mi esposa Jenniffer viniese conmigo, si tuviese un empleo como el mío y un salario como ganan los gringos . 
Como soy fanático de los tatuajes, no podía volver a Miami y no pasar por el local de uno de mis programas favoritos: Miami Ink. Pero dura fue la sorpresa que recibí. El local del programa solo lo usan para grabar, ahora es para venta de ropa. Y la más dura: como ellos eran famosos, solo iban al local a grabar episodios, los que tatuaban eran otros.
Ya para las clases, debíamos estudiar muy duro, y que mejor forma que anestesiados (perdón, estimulados) por par de tragos? Esas dos cosas no combinan pero, después de una buena bebida, una mini-resaca contenida y el hambre al día siguiente. Mi nota de evaluación fue de 94 puntos. Así que si quieren ser tan inteligentes como yo... vamos todos a beber. (Mentira, no me crean)
Tan chico es el mundo que el día antes del vuelo de regreso a ciudad apagón, en Walmart me topé con mi primo Jesús, al que no veía hace más de 5 años. De inmediato me invitó a su apartamento en Fountaine Blue. Un buen residencial cerrado con piscina por allí, canchas por aquí, esto por allá, lo otro por aquí. Como es costumbre entre nosotros; si estamos fuera del país, no salimos solos, siempre andamos con un compañero (uno nunca sabe). Así que me llevé a Halldor, no entramos bien al apartamento y ya teníamos bebida en las manos mucho antes de sentarnos... Buena bienvenida, mejor dicho; "bienbebida".
Consciente de que el vuelo era por la mañana y viendo que ya hablábamos puros disparates y acabamos siendo compadres. ¡Salud! Cuando dieron las 3 de la madrugada le dije a Halldor: mano, vámonos de aquí, y el tremendo solo respondió, vete tú, que yo me voy a dormir en el sillón. Ese fue el aviso de "recoge, que nos vamos".
Viendo la hora, y el jumazo que mi primo teníamos, le pedí a este y a su esposa que nos llevaran al aeropuerto. Cuando nos dejan en la puerta del hotel, a mi primo solo le falté cargarnos hasta el elevador.. Se le veía lo contento, feliz de que lo hayamos visitado... Lamentablemente solo fue un día.
Ya en el aeropuerto, con una de las resacas más grandes que he tenido, solo me queda ponerme a hacer coro para no dormirme. Así que me pongo a dar vueltas a ver que otra cosita le compro a mi esposa Jenniffer, vi unos llaveros con su nombre bien chulos y le compré dos.
Otra sorpresa fue toparme en el aeropuerto con Rafa, dentro de los pilotos: mi mejor amigo. También andaba haciendo unos entrenamientos, pero solo hacía escala en Miami. Así que ni hablamos mucho, ni tomamos el mismo avión.
Acabo aquí, con mi última foto en el avión. Creo que no hay más de qué escribir. Fui y volví, jugué la lotto y no me saqué. A diferencia del viaje del 2007, en que llevé a casa 3 maletas, una a mi hija, una (y media) a mi esposa, (casi) una para mí... ahora solo traje una maleta.

¿Habrá otro viaje a Miami?  ¡Ojalá!

03/11/2007

Miami, Pan Am Flight Academy 2007

Rompiendo con la vieja tradición de que solo los radaristas se entrenaban en Miami anualmente, los torreros fuimos agraciados con el 1er viaje al exterior.

Cuando me llamaron de la oficina: "Roy, trae tu pasaporte". Yo dije: ¿el qué? Yo no tengo eso. Así que arranqué y lo conseguí, aproveché y también tramité el de mi esposa. Cuando confirmo que es para Miami que voy, mi esposa Jenniffer con la "poniendo carita", a lo mejor imaginándose sola, o tal vez que yo me alocara y decidiera quedarme por allá.

Nos dieron US$ 3,000 dolares por cabeza para gastar en 15 días. Nos fuimos en AA, con ticket ida-vuelta pago, llegamos a Miami y derechito a alquilar un carro del año. Luego pasamos al hotel Comfort Inn, no es la gran cosa pero es acogedor y queda frente a frente al aeropuerto. Dominicanos al fin, nos metimos de a 4 por habitación doble, pero no me gusta eso de dormir con otro hombre en la misma cama, así que pagué un poco más para tener una cama para mí solo.
Ya ubicados en las habitaciones, sin nunca haber estado nosotros en Miami, cogimos calle a comprar de todo y nada a la vez. Personalmente yo salí para cumplir con el único consejo que me dio un radarista: llévate un bultico con ropa para un (1) día, pues la que llevas la vas a botar y comprarás cosas a diario. Así hice, y así pasó. Día tras día compraba ropa para mi esposa y algunas cosas para mí.
Miami en resumen es: Mujeres buenas, muchas. Carros deportivos, carros de lujo, mucha comida, muchos letreros, calles bien limpiecitas, muchos carriles. Muchas tiendas, mucha ropa buena, mucho spanglish, muchos cubanos, ¿leíste, chico? Mucha organización, mucha electricidad ¿Apagón? ¿Qué es eso? Y sobre todo nadie toca bocina. Inversamente proporcional a mi paisito.
Nos dijeron un lugar de comida rápida, el Stop N' Shop, cada día caíamos por allá a comer, comprar paquetes de Miller. Yo aprovechaba para jugar la loto de Miami. Con 1 dólar hasta 10 millones, con 2 dólares hasta 19 millones y con 3 dólares hasta 33 milloncitos de los que no "jieden". Hasta los repartí sin haberme ganado nada.
Nos la pasamos así:  Escuela-Stop N Shop-Walmart-Hotel-para la calle (donde sea)... la ruta Telemicro. No puedo dejar de decir que: Si fuese por Michelle, desayuno, comida, cena, compras, paseos y demás cosas serian solo en Walmart (ni que tuviera algún descuento)...Pero cuando yo no estaba por salir, o si había calculado ahorrarme unos dolaritos para comprarme algo, me trancaba en la habitación del hotel con un "chin" de Miller, oyendo música en la laptop y chateando con mi esposa...
En la escuela hacia un "mardito frío der diablo", debí comprarme par de abrigos y par de gorros (solo me faltaron los guantes). Allá nos daban canquiña, clase y clase, pero por suerte nos daban buenos repasos antes de evaluarnos. Tuve la suerte de estar siempre cerca de mi gran amigo Eddy, cariñosamente "don Cangrejo", no por tacaño, sino que vive en un pueblo llamado así. Es algo necio, pero bella persona, buen compañero y buen chofer.
En la escuela, los simuladores eran lo máximo, eran como un mini cine, solo para nosotros. Pero por ser solo para nosotros debíamos dar el 100 % de lo aprendido cuando iniciamos y el 100 % de lo recordado con los repasos, y eso llevarlo a la práctica simulada. Salíamos con el cerebro fundido de tanta presión, pero ya saben la ruta después de clases: ¡Para la calle!  Así que, a echar gasolina y a dar rueda.
Una de las cosas que más entretenimiento nos dio, fue cuando Chamú se nos perdió en Sawgrass Mills. Ese mega mall es tan, pero tan grande que se debe ir por la mañanita para que acabando la tarde haber visto el 80 % de cada zona. Chamú se alejó por ver una mochila y dejó el celular con nosotros, a eso de las 4:00 p. m. y apareció como a las 7 de la noche, "vuelto un cebo". No podíamos esperarlo en el auto porque no sabíamos dónde lo dejamos y él tenía las llaves. Después de que el gordo aparece, empezamos a buscar el carro. Salimos de allá como a las 8 de la noche, de regreso al hotel.
Cuando Héctor, cariñosamente "Super Bimbó, descubrió China Buffet, la ruta Telemicro se distorsionó. Ese hombre nos hacía dar ese viaje a diario para comer todo con de todo, y luego a repetir, por el módico precio de $ 7 dólares. Una comida de 4, da como mínimo US$ 32 dólares, más una obligada propina hacen los US$ 35. Lo feo pasó cuando un grupo de nuevos fueron por 1ra vez, comieron como locos y por alguna razón solo dieron 1 dólar de propina. La chinita los miró casi gritando: ¡uan dola!, ¡uan dola!, ¡yos uan dola! Eso fue como un insulto para los amarillos, por lo que al volver después, los muchachos se "dejaron caer" con algo más de la propina obligatoria.
Siempre dicen que soy un lío, que soy el diablo, que soy "rosca izquierda" y demás cosas pero, díganme ustedes por qué la habitación donde estaba yo con Eddy, Chamú y Rainier, era  la más visitada, la más popular y la que siempre tenía comida y algún líquido. Iba tanta gente a nuestra habitación que preferíamos no poner seguro a la puerta. Debo aclarar que habían 3 laptops, cosa que podía llamar la atención, pero al final solo eran uno o dos los "viciaos" que solo iban a eso. En fin, ese era el cuarto de la chercha, vivía lleno de torreros, radaristas, instructores y algunas visitas del mismo Miami.
No me saque la lotto de Miami pero conocí un verdadero país, no un relajo como es donde me vi obligado a regresar. Aprendí nuevas formas de hacer los que hace tiempo aprendí, me sentí motivado por la excelente influencia técnica de los instructores de la escuela, especialmente el Sr. Aragón, y el Sr. Coronel. Ellos nos subían la autoestima aunque algunos de los instructores dominicanos hacían lo posible por hacernos ver como ignorantes, desinformados y menos capacitados que los controladores más nuevos en la carrera. Ese menosprecio nunca lo voy a olvidar, lo que sube baja... y no son aviones.
Al final, me dieron mi diplomita como a todo el mundo, pero contrario a lo que deseaban algunos, no dice que "he participado", dice "Exitosamente ha completado el entrenamiento". Eso me hizo sentir bien, pero mi gran sorpresa fue cuando el sr. Aragón, jefe de los instructores de la  academia, dijo explícita y claramente que yo tuve el mejor desempeño de todo el grupo. Eso no le gustó a los instructores que no me tienen en su reino. Pero, ¿a mí qué me importa? 

Si sigo escribiendo a este paso... o me multan, o me suspenden, o me botan... Así  que me voy yo solito, antes de que me lleve Cundo.

27/03/2007

Sábado en Punta Cana sin APP


Los que me conocen, saben que prefiero hacer turnos nocturnos, pero mi jefe dijo necesitarme para una secuencia todo el día  del sábado 24, domingo 25 y lunes 26 de febrero, (y anque eran mis días libres) no iba a negarme. ¡Pero, qué maldito turno!

Karilyn (que tenía menos experiencia) y yo llegamos antes de las 11:00 a. m., casi a la vez con los 3 de Aproximación, Cristian, Julio y otro más. Relevamos a Alexis y Jorge, quienes tenían un "tro" de aviones. Para sorpresa, los tres APP se quedaron con nosotros en la TWR pues la llave de APP no apareció. Resulta que por error, uno de los de APP salientes la tenía en su bolsillo, olvidó entregarla y se la llevó para Santo Domingo. Imagínense un sábado "encendido" en PNA, pero sin APP porque los aproximadores no pudieron entrar a su área de trabajo.

Algo que puso más intenso el turno es que el radar de CDO había fallado y se aplicaba control de afluencia. Eso ocasionó demoras a "titiri mundati", tanto en tierra como en vuelo. Algunos aviones hasta apagaban motores después de más de 45 minutos de espera, o abrían ventanillas. Algunas regresaban a rampa para reabastecer combustible. A esto le sumamos también la ya conocida falta de coordinación y planificación del personal de operaciones y rampa. También el sistema automático de tirillas fallaba a cada rato. Sin contar la gran cantidad de helicópteros sobrevolando la línea de costa. A más de las 3:00 p. m., estoy muerto del hambre y solo me dieron unos 10 minutos para tragarme la comida.

Yo iba preparado mentalmente para un sábado de mucho trabajo, ¡pero no tanto! Ese día estaban varias condiciones necesarias para un desastre, pero nada malo pasó gracias al trabajo en equipo en PNA. Tuvimos suerte de que los aproximadores llegaron con nosotros daban apoyo (sin dar APP) coordinando con el ACC, también hubo buena labor de algunos coordinadores en el ACC. Otros allá no lo hicieron a la altura que yo suponía que debían hacerlo, en algunas ocasiones perdimos un tiempo muy valioso, eso lo vi ese sábado. Entiendo que la magnitud de la situación de ese día no se podía pasar por alto, y sé que Punta Cana no es el único aeropuerto, pero díganme si había otro con más operaciones que nosotros ese sábado. ¡Y todo salió bien!

Cerca de las 4:00 p. m., mandan la famosa llave de APP en el HI510CA, pero ante tantas demoras, el piloto dijo por frecuencia: "Ey, yo traigo la llave de APP, déjenme llegar o me voy a La Romana". Eran tantos aviones que no pudimos hacer que llegara y se fue a LRN. Eso significó más tiempo sin servicio de APP. Habían aviones sin despegar, aviones sin aterrizar, y según me dicen, el propietario del aeropuerto estaba "echando peste" por la boca porque un avión que estaba en el vip no había despegado. ¡Gran vaina! (como si fuera el único).

Ya a las 6:00 p. m. llega la famosa llave, ¡por fin! Y a eso de las 6:30 p. m. somos relevados por los entrantes, a quienes les quedaban unas 20 operaciones más. Cuando bajamos de la TWR, le dije a Karilyn: "linda, nos ganamos una fría". Y eso hicimos, fuimos a la noche a la Bolera. No se cuántas neuronas quemé ese día, pero solo se que fue intenso y emocionante. El domingo y lunes algunos controladores de ese y otros aeropuertos nos llamaban preguntando que cómo nos hicimos ese sábado sin APP.

El lunes llegué a la capital, después de mucha lucha de guagua en guagua y carros públicos. Yo sentía una emoción con el "pechito parado". Yo siempre relajaba a los que hablaban de "la satisfacción del deber cumplido", pero esta fue una de las veces en que ciertamente la sentí. Adoro mi trabajo, aunque nadie me diga que lo hago bien. En el carro público, llegando a casa casi a las 10:00 p. m., me sentía super feliz. Me sentí orgulloso de mi trabajo, parece que me entrenaron bien. Desde que entré a casa le conté todo a mi bella esposa, quien me esperaba desde temprano. Aunque no me lo digan, sé que soy un buen controlador. Lo demostré otra vez.

Le doy las gracias a Karilyn, quien siendo relativamente nueva puso todo de su parte haciendo un excelente trabajo. Gracias a Cristian, a Julio y a los demás por apoyarnos en lo que pudieron. Gracias a los del ACC que se integraron a un trabajo en equipo que nos caracteriza (aunque pudieron hacerlo mejor), gracias a los pilotos que no se quejaron ante la situación (fueron pocos), aun siendo ellos los más afectados.

En definitiva, hicimos lo de siempre, protegimos vidas e intereses ajenos, y no nos dan ni las gracias, je je. ¡Y dicen que ganamos demasiado! No nos quejamos, pues para eso nos pagan. Este es nuestro trabajo, nuestro estilo de vida.

¿Yo no quería ser controlador? ¡Pues soy controlador!