03/11/2007

Miami, Pan Am Flight Academy 2007

Rompiendo con la vieja tradición de que solo los radaristas se entrenaban en Miami anualmente, los torreros fuimos agraciados con el 1er viaje al exterior.

Cuando me llamaron de la oficina: "Roy, trae tu pasaporte". Yo dije: ¿el qué? Yo no tengo eso. Así que arranqué y lo conseguí, aproveché y también tramité el de mi esposa. Cuando confirmo que es para Miami que voy, mi esposa Jenniffer con la "poniendo carita", a lo mejor imaginándose sola, o tal vez que yo me alocara y decidiera quedarme por allá.

Nos dieron US$ 3,000 dolares por cabeza para gastar en 15 días. Nos fuimos en AA, con ticket ida-vuelta pago, llegamos a Miami y derechito a alquilar un carro del año. Luego pasamos al hotel Comfort Inn, no es la gran cosa pero es acogedor y queda frente a frente al aeropuerto. Dominicanos al fin, nos metimos de a 4 por habitación doble, pero no me gusta eso de dormir con otro hombre en la misma cama, así que pagué un poco más para tener una cama para mí solo.
Ya ubicados en las habitaciones, sin nunca haber estado nosotros en Miami, cogimos calle a comprar de todo y nada a la vez. Personalmente yo salí para cumplir con el único consejo que me dio un radarista: llévate un bultico con ropa para un (1) día, pues la que llevas la vas a botar y comprarás cosas a diario. Así hice, y así pasó. Día tras día compraba ropa para mi esposa y algunas cosas para mí.
Miami en resumen es: Mujeres buenas, muchas. Carros deportivos, carros de lujo, mucha comida, muchos letreros, calles bien limpiecitas, muchos carriles. Muchas tiendas, mucha ropa buena, mucho spanglish, muchos cubanos, ¿leíste, chico? Mucha organización, mucha electricidad ¿Apagón? ¿Qué es eso? Y sobre todo nadie toca bocina. Inversamente proporcional a mi paisito.
Nos dijeron un lugar de comida rápida, el Stop N' Shop, cada día caíamos por allá a comer, comprar paquetes de Miller. Yo aprovechaba para jugar la loto de Miami. Con 1 dólar hasta 10 millones, con 2 dólares hasta 19 millones y con 3 dólares hasta 33 milloncitos de los que no "jieden". Hasta los repartí sin haberme ganado nada.
Nos la pasamos así:  Escuela-Stop N Shop-Walmart-Hotel-para la calle (donde sea)... la ruta Telemicro. No puedo dejar de decir que: Si fuese por Michelle, desayuno, comida, cena, compras, paseos y demás cosas serian solo en Walmart (ni que tuviera algún descuento)...Pero cuando yo no estaba por salir, o si había calculado ahorrarme unos dolaritos para comprarme algo, me trancaba en la habitación del hotel con un "chin" de Miller, oyendo música en la laptop y chateando con mi esposa...
En la escuela hacia un "mardito frío der diablo", debí comprarme par de abrigos y par de gorros (solo me faltaron los guantes). Allá nos daban canquiña, clase y clase, pero por suerte nos daban buenos repasos antes de evaluarnos. Tuve la suerte de estar siempre cerca de mi gran amigo Eddy, cariñosamente "don Cangrejo", no por tacaño, sino que vive en un pueblo llamado así. Es algo necio, pero bella persona, buen compañero y buen chofer.
En la escuela, los simuladores eran lo máximo, eran como un mini cine, solo para nosotros. Pero por ser solo para nosotros debíamos dar el 100 % de lo aprendido cuando iniciamos y el 100 % de lo recordado con los repasos, y eso llevarlo a la práctica simulada. Salíamos con el cerebro fundido de tanta presión, pero ya saben la ruta después de clases: ¡Para la calle!  Así que, a echar gasolina y a dar rueda.
Una de las cosas que más entretenimiento nos dio, fue cuando Chamú se nos perdió en Sawgrass Mills. Ese mega mall es tan, pero tan grande que se debe ir por la mañanita para que acabando la tarde haber visto el 80 % de cada zona. Chamú se alejó por ver una mochila y dejó el celular con nosotros, a eso de las 4:00 p. m. y apareció como a las 7 de la noche, "vuelto un cebo". No podíamos esperarlo en el auto porque no sabíamos dónde lo dejamos y él tenía las llaves. Después de que el gordo aparece, empezamos a buscar el carro. Salimos de allá como a las 8 de la noche, de regreso al hotel.
Cuando Héctor, cariñosamente "Super Bimbó, descubrió China Buffet, la ruta Telemicro se distorsionó. Ese hombre nos hacía dar ese viaje a diario para comer todo con de todo, y luego a repetir, por el módico precio de $ 7 dólares. Una comida de 4, da como mínimo US$ 32 dólares, más una obligada propina hacen los US$ 35. Lo feo pasó cuando un grupo de nuevos fueron por 1ra vez, comieron como locos y por alguna razón solo dieron 1 dólar de propina. La chinita los miró casi gritando: ¡uan dola!, ¡uan dola!, ¡yos uan dola! Eso fue como un insulto para los amarillos, por lo que al volver después, los muchachos se "dejaron caer" con algo más de la propina obligatoria.
Siempre dicen que soy un lío, que soy el diablo, que soy "rosca izquierda" y demás cosas pero, díganme ustedes por qué la habitación donde estaba yo con Eddy, Chamú y Rainier, era  la más visitada, la más popular y la que siempre tenía comida y algún líquido. Iba tanta gente a nuestra habitación que preferíamos no poner seguro a la puerta. Debo aclarar que habían 3 laptops, cosa que podía llamar la atención, pero al final solo eran uno o dos los "viciaos" que solo iban a eso. En fin, ese era el cuarto de la chercha, vivía lleno de torreros, radaristas, instructores y algunas visitas del mismo Miami.
No me saque la lotto de Miami pero conocí un verdadero país, no un relajo como es donde me vi obligado a regresar. Aprendí nuevas formas de hacer los que hace tiempo aprendí, me sentí motivado por la excelente influencia técnica de los instructores de la escuela, especialmente el Sr. Aragón, y el Sr. Coronel. Ellos nos subían la autoestima aunque algunos de los instructores dominicanos hacían lo posible por hacernos ver como ignorantes, desinformados y menos capacitados que los controladores más nuevos en la carrera. Ese menosprecio nunca lo voy a olvidar, lo que sube baja... y no son aviones.
Al final, me dieron mi diplomita como a todo el mundo, pero contrario a lo que deseaban algunos, no dice que "he participado", dice "Exitosamente ha completado el entrenamiento". Eso me hizo sentir bien, pero mi gran sorpresa fue cuando el sr. Aragón, jefe de los instructores de la  academia, dijo explícita y claramente que yo tuve el mejor desempeño de todo el grupo. Eso no le gustó a los instructores que no me tienen en su reino. Pero, ¿a mí qué me importa? 

Si sigo escribiendo a este paso... o me multan, o me suspenden, o me botan... Así  que me voy yo solito, antes de que me lleve Cundo.

27/03/2007

Sábado en Punta Cana sin APP


Los que me conocen, saben que prefiero hacer turnos nocturnos, pero mi jefe dijo necesitarme para una secuencia todo el día  del sábado 24, domingo 25 y lunes 26 de febrero, (y anque eran mis días libres) no iba a negarme. ¡Pero, qué maldito turno!

Karilyn (que tenía menos experiencia) y yo llegamos antes de las 11:00 a. m., casi a la vez con los 3 de Aproximación, Cristian, Julio y otro más. Relevamos a Alexis y Jorge, quienes tenían un "tro" de aviones. Para sorpresa, los tres APP se quedaron con nosotros en la TWR pues la llave de APP no apareció. Resulta que por error, uno de los de APP salientes la tenía en su bolsillo, olvidó entregarla y se la llevó para Santo Domingo. Imagínense un sábado "encendido" en PNA, pero sin APP porque los aproximadores no pudieron entrar a su área de trabajo.

Algo que puso más intenso el turno es que el radar de CDO había fallado y se aplicaba control de afluencia. Eso ocasionó demoras a "titiri mundati", tanto en tierra como en vuelo. Algunos aviones hasta apagaban motores después de más de 45 minutos de espera, o abrían ventanillas. Algunas regresaban a rampa para reabastecer combustible. A esto le sumamos también la ya conocida falta de coordinación y planificación del personal de operaciones y rampa. También el sistema automático de tirillas fallaba a cada rato. Sin contar la gran cantidad de helicópteros sobrevolando la línea de costa. A más de las 3:00 p. m., estoy muerto del hambre y solo me dieron unos 10 minutos para tragarme la comida.

Yo iba preparado mentalmente para un sábado de mucho trabajo, ¡pero no tanto! Ese día estaban varias condiciones necesarias para un desastre, pero nada malo pasó gracias al trabajo en equipo en PNA. Tuvimos suerte de que los aproximadores llegaron con nosotros daban apoyo (sin dar APP) coordinando con el ACC, también hubo buena labor de algunos coordinadores en el ACC. Otros allá no lo hicieron a la altura que yo suponía que debían hacerlo, en algunas ocasiones perdimos un tiempo muy valioso, eso lo vi ese sábado. Entiendo que la magnitud de la situación de ese día no se podía pasar por alto, y sé que Punta Cana no es el único aeropuerto, pero díganme si había otro con más operaciones que nosotros ese sábado. ¡Y todo salió bien!

Cerca de las 4:00 p. m., mandan la famosa llave de APP en el HI510CA, pero ante tantas demoras, el piloto dijo por frecuencia: "Ey, yo traigo la llave de APP, déjenme llegar o me voy a La Romana". Eran tantos aviones que no pudimos hacer que llegara y se fue a LRN. Eso significó más tiempo sin servicio de APP. Habían aviones sin despegar, aviones sin aterrizar, y según me dicen, el propietario del aeropuerto estaba "echando peste" por la boca porque un avión que estaba en el vip no había despegado. ¡Gran vaina! (como si fuera el único).

Ya a las 6:00 p. m. llega la famosa llave, ¡por fin! Y a eso de las 6:30 p. m. somos relevados por los entrantes, a quienes les quedaban unas 20 operaciones más. Cuando bajamos de la TWR, le dije a Karilyn: "linda, nos ganamos una fría". Y eso hicimos, fuimos a la noche a la Bolera. No se cuántas neuronas quemé ese día, pero solo se que fue intenso y emocionante. El domingo y lunes algunos controladores de ese y otros aeropuertos nos llamaban preguntando que cómo nos hicimos ese sábado sin APP.

El lunes llegué a la capital, después de mucha lucha de guagua en guagua y carros públicos. Yo sentía una emoción con el "pechito parado". Yo siempre relajaba a los que hablaban de "la satisfacción del deber cumplido", pero esta fue una de las veces en que ciertamente la sentí. Adoro mi trabajo, aunque nadie me diga que lo hago bien. En el carro público, llegando a casa casi a las 10:00 p. m., me sentía super feliz. Me sentí orgulloso de mi trabajo, parece que me entrenaron bien. Desde que entré a casa le conté todo a mi bella esposa, quien me esperaba desde temprano. Aunque no me lo digan, sé que soy un buen controlador. Lo demostré otra vez.

Le doy las gracias a Karilyn, quien siendo relativamente nueva puso todo de su parte haciendo un excelente trabajo. Gracias a Cristian, a Julio y a los demás por apoyarnos en lo que pudieron. Gracias a los del ACC que se integraron a un trabajo en equipo que nos caracteriza (aunque pudieron hacerlo mejor), gracias a los pilotos que no se quejaron ante la situación (fueron pocos), aun siendo ellos los más afectados.

En definitiva, hicimos lo de siempre, protegimos vidas e intereses ajenos, y no nos dan ni las gracias, je je. ¡Y dicen que ganamos demasiado! No nos quejamos, pues para eso nos pagan. Este es nuestro trabajo, nuestro estilo de vida.

¿Yo no quería ser controlador? ¡Pues soy controlador!

17/03/2007

Morir con estilo (pt.2)

En la vida todo perdí, 
quedé colgando de un hilo.
Solo quedó para mí, 
el deseo de morir con estilo.

Crucé un túnel oscuro, 
temiendo un nuevo fracaso.
Si muero de nuevo te juro,
que solo será en tus brazos.

Fue tan largo el viaje 
y tan oscuro el camino.
Tan pesado equipaje, 
solo descanso contigo.

Mi vida cayó de un hilo, 
pero he vuelto a nacer.
Después de morir con estilo, 
por tí moriría otra vez.

17/01/2007

Sexo Sentido

Sabes que ese juego empieza con caricias,
y acaba en un fuego con llamas de delicia.

Protégete, ten sexo seguro.
Cuídate, piensa en tu futuro.

El ritmo no es seguro, hay margen para errores,
la pastilla es segura y sus efectos posteriores.

Protégete, ten sexo seguro.
Cuídate, piensa en tu futuro.

Si apagas tu fuego sin cuidarte otra vez,
puede que en el juego empiecen dos y acaben tres.

27/10/2006

¿Quién lo diría?

¿Quién diría que con huevo y batata me intoxicaría?
¡Boté peste por esa boca,
que maldiciones fueron pocas!
Ni a dieta estaba,
ni me iba a desayunar ese día.
Me dio una diarrea apretá,
boté agua "por alante y por atrá"

Por el jodío desayuno del aeropuerto,
ahora yo estaría muerto.
No me interné en Higuey,
pues pal campo nadie me iba a "vei".
Cogí mi guagua frío como reptil,
con mis 4 pastillas de lomotil.
Me monté con mi "fullín apretao",
esperando no llegar "cagao".

Contrario a lo que tenía pensado,
casi nadie me ha llamado.
Poca falta me hacen.
Pues mientras unos mueren, otros nacen.

No es mi caso pero debe ser duro,
intoxicarse y no tener seguro.
Allá no comeré por gratis que sea,
prefiero botar dinero que diarrea.

Aún tengo el "morao" del suero,
si sigo así por poco me muero.
La marca parece un chupón,
 pero un chupón hecho por un cuero.

Por suerte estoy claro por figureo,
pues un pana me grabó en video.
Y mi mujer que no se confunda,
que ese "morao" no me lo hizo una vagabunda.